Estoy harta del hilo rojo,
y dicen por ahí que se compadecen de mi porque nunca podré cortarlo.
Estoy a punto de colapsarte solo para que te rindas tu primero
y ceses de buscarme.
Estoy sentada esperando que llegue el metro
y sola pienso que estoy bien.
Estoy que me pierdo si llamas, y no puedo decidir todavía si podré quererte como dicen los libros que hay que querer.
Estoy en la mierda y sin voz,
porque fumar es el nuevo vicio moderno que se me ha ocurrido como excusa para centrarme en todo menos en ti.
Estoy acabada en punto y aparte,
compuesta por trece frases sin comas,
dos mentiras
y un nuevo sentido del dolor en cada palabra.
Estoy perfectamente mal aquí,
subida a tu azotea sin que tu lo sepas,
tirando cáscaras de pipa a los distraídos que pasean por calles feas de asfalto.
Algunos me gritan enfadados,
y les respondo que soy la loca del sexto,
para que llamen y te despierten de la siesta dominguera o entresemanal.
Estoy asqueada después de la ducha,
muriendo de hambre después de cenar,
sedienta tras el café,
aburrida pese a mis libros de poesía.
"Tú puedes arreglar este desastre" susurra cada poro de mi piel.
Veamos si esta noche me convencen.

Comentarios

Entradas populares