Tengo una mancha de café
en ese dibujo a carboncillo
de una chica con ojos brillantes
y sonrisa inerte en el rostro.
No sabré de otras cosas,
pero de sentimientos vacíos
y de papeles en blanco
soy toda una experta.
"¿Que tal?"
Les hablé de ti y no de amor,
eso es que todo va bien.
Ahora he vuelto a fumar,
cada vez más,
porque me gusta consumirme de alguna manera,
para no olvidar que estoy viva
y que acabaremos muriendo.
También he decidido que las noches ya
no están para dormir,
ni para follar,
ni para compartir,
y la luna siempre merece la pena ser observada,
incluso cuando no se ve.
Voy, por cierto, a irme de aquí.
Si abandono
quizá se me plantee la oportunidad
de engañarme a mi misma
y fingir que puedo volver a empezar de cero.
Otra vez folios en blanco,
y carboncillo,
y sentimientos vacíos,
y marcas de café,
y tabaco...
Todo está casi igual,
pero sin ti.
Que no intenten encontrarme,
ni convencerme con esa positividad de mierda.
No puedes sufrir la soledad
si nunca has sentido otra cosa.
Quédate con mis palabras tristes,
te las doy,
ya no queda nada más que puedas quitarme...

Comentarios

Entradas populares